La fachada
1. Construcción. La fachada de San Andrés Apóstol “della Valle” se debe a Carlo Rainaldi (1611-1691), aun cuando desde enero de 1662 se señala la presencia, “para reconocimiento” y para la asistencia, de Carlo Fontana (1634-1714). A los trabajos de construcción, iniciados en 1661, si puso fin en 1667, aunque la inscripción, que data el final de la construcción, lleva el 1665:
ALEXANDER SEPT. P. M. S. ANDREAE APOSTOLO AN. SALVTIS MDCLXV.
2. Descripción. La fachada es de dos órdenes o pisos sobrepuestos y separados por una sobresaliente cornisa sobre ménsulas. Cada orden –corintio abajo y compuesto arriba– tiene ocho columnas, simétricamente emparejadas. Más amplio es el piso inferior que se extiende en cinco espacios, mientras el segundo piso, el superior, se recoge a solo tres espacios, dando así impulso al tímpano final. Bastante más anchos son los espacios centrales de los dos pisos. En aquel inferior, apoyado sobre la escalinata de acceso, está el portal de ingreso. La puerta está entonces superada por un cimacio arcado embellecido por dos virtudes: la Oración (o la Fortaleza) y la Esperanza (Iacopo Antonio Fancelli, 1606-1674). Entre ejes elevados el escudo de armas de la familia Peretti. En el segundo orden, en correspondencia con la puerta mayor, se abre el ventanal, provisto de una balaustra a modo de balconcito con barandilla, al que se accede desde la cornisa interior de la iglesia. En la cumbre, adentro del tímpano que está por arriba de fachada, dos ángeles sostienen el escudo pontificio de Alejandro VII.
3. Las estatuas. Dieciocho estatuas y figuras, entre pequeñas y grandes, pueblan la fachada. En el piso inferior, cerca de la puerta de ingreso, a la izquierda de quien observa, San Andrés Apóstol(Ercole Ferrata, 1610-1686); del otro lado, San Sebastián (Domenico Guidi, 1625-1701). Son los dos titulares de la iglesia. Más retirados, a la izquierda, San Cayetano Thiene (D. Guidi) y a la derecha, San Andrés Avelino (E. Ferrata), dos santos teatinos, fundador de la Orden el primero, protector contra la muerte imprevista el segundo. Arriba de cada nicho se ven dos angelitos en bajorrelieve sosteniendo los símbolos característicos de los cuatro santos mencionados (debidos por una parte a E. Ferrata, por otra parte a D. Guidi, aunque atribuidos también a I. A. Fancelli). En el piso superior, los dos nichos destinados a los santos Pedro y Pablo están vacíos. En la esquina izquierda, un ángel que representa la Fama (E. Ferrata), mientras del lado opuesto falta el ángel que lograría la simetría. La fachada fue sometida en 1990 a un trabajo de restauración que comprendió limpieza, consolidación y protección de todo el alzado gracias a un generoso donativo de la banca CARIPLO (Cassa de Risparmio delle Province Lombarde).